jueves, 17 de diciembre de 2009

Pico, zorro, zaina

Un viejo amigo, excelente traumatólogo, afirma que si a partir de los 40 no te duele algo, es que falleciste; así que, a juzgar por el pertinaz dolorcillo que hoy fustiga mi espalda, hemos de concluir que estoy tremendamente vivo. Probablemente mi espalda esté pagando facturas del pasado; vamos, lo de siempre, malas posturas, esfuerzos innecesarios y deportes mal ejecutados. Viene a mi memoria, ahora que estamos metidos en eso de ordenar los recuerdos del pasado, un juego que practicábamos los mozalbetes en el barrio y que decíamos “pico, zorro, zaina”.

En el juego, a disputar entre dos grupos de muchachos, se establecía una fila de chavales agachados, uno detrás de otro, con la cabeza introducida entre las piernas del anterior, así hasta el primero, que permanecía de pie. En esta disposición, los del otro grupo, saltaban, de uno en uno, sobre las espaldas de los agachados, hasta que todos quedasen dispuestos a modo de caballeros encima de sus monturas. De tal guisa, los de arriba hacían un determinado gesto y los de abajo, las monturas, debían adivinar, si tal gesto se correspondía con pico, con zorro o con zaina.

La cuestión es que el salto en sí terminaba en las espaldas de uno de los muchachos montura, con un golpear de los que pasan factura; era, en el decir de entonces, una actividad estrictamente varonil; naturalmente, esta actividad, tan de gañanes, no gustaba a las chicas, al menos no la practicaban. Podemos dejar la cuestión aquí, sin hurgar con el dedo, pero soy de un natural polemista y claro, he de preguntarme, por qué las chicas no saltaban unas encima de otras con objeto de doblar la espalda de la vecina.

Han pasado muchos años ya, he visto como han caído muchas barreras, prohibiciones y tabúes; he visto como las guerras siguen siendo guerras y las hambres siguen siendo hambrunas; he visto como las mujeres progresan, como dominan en las oposiciones, como determinadas profesiones (médicos, juristas...) se están feminizando y veo, aun sigo viendo, como en las aulas lo femenino deja atrás a los masculino en cualquier disciplina. Lo que no he visto aún es a mujeres jugando a pico,zorro, zaina. ¿Será una cuestión de inteligencia?

No hay comentarios:

Publicar un comentario